Para el exprocurador Anticorrupción, existen problemas específicos que el juez de EE.UU. debe centrarse como la alta capacidad del extraditable de tener contactos y comunicaciones.
El ex presidente de la República, Alejandro Toledo afrontará su proceso de extradición en libertad si no es modificado su régimen penitenciario hasta el martes 22 de octubre.
Para el ex procurador Anticorrupción, Antonio Maldonado, el dictamen del juez no le habría dado el suficiente peso específico a otras variables de su situación carcelaria.
“Hay que decir que Toledo se encuentra en una situación de aislamiento a su solicitud. Él ha pedido esta condición porque teme ser agredido por otros presos”, dijo Maldonado y puntualizó que si es una situación que le ocasiona un escenario de dolor personal o sufrimiento, él puede liberarse de manera inmediata, allanándose al proceso de extradición.
Contactos y comunicaciones
Para el exprocurador, el juez entra a valorar otro estándar que es el de peligro de fuga. Sin embargo existen problemas específicos como la alta capacidad del extraditable de tener contactos y comunicaciones con el mundo exterior más allá de los EE.UU.
En segundo lugar la alta motivación que tiene el extraditable para evadir los graves cargos que se le imputan mediante una fuga y la tercera la capacidad económica que tiene.
La Sala Penal Permanente de la Corte Suprema programó para el próximo 15 de noviembre la audiencia de calificación sobre la casación que presentaron sus abogados en contra de la orden de congelamiento de sus cuentas que mantiene en Perú.