Proyectos inmobiliarios bajo la modalidad de Vivienda de Interés Social (VIS) siguen generando controversia en Lima, esto debido a que existen edificios que superan los límites de altura permitidos y departamentos que cuestan mucho más de lo estipulado, según un informe reciente de la Contraloría. Algunos de estos edificios, ya construidos o en desarrollo, se ubican en distritos como San Isidro, Miraflores y Santiago de Surco, donde la normativa municipal establece límites mucho más bajos.
En San Isidro, por ejemplo, la Contraloría detectó que revisores urbanos otorgaron licencias para construir hasta 27 o 28 pisos, pese a que la regulación local solo permite un máximo de 10 pisos. Además, departamentos que debían estar valorizados en aproximadamente 150 mil soles se venden por encima de los 500 mil, cuestionando la transparencia de estos proyectos.
El origen de esta situación se remonta al 2016, cuando el gobierno de PPK impulsó el Decreto Supremo 022-2016, que habilitó modalidades para construir VIS sin sujetarse estrictamente a las normativas municipales. Esto permitió que las empresas inmobiliarias, tras un rechazo inicial de la municipalidad, acudieran al Ministerio de Vivienda para obtener licencias excepcionales, generando un vacío regulatorio.
CONTRALORÍA REPORTA MÁS DE 28 PROYECTOS IRREGULARES EN SAN ISIDRO
Los revisores urbanos, profesionales contratados por las propias inmobiliarias, carecen de una regulación específica por parte del Ministerio de Vivienda, según denuncia del Colegio de Arquitectos. La Contraloría reporta más de 28 proyectos irregulares solo en San Isidro, mientras que Miraflores y Surco enfrentan problemas similares, pese a que el Tribunal Constitucional ha reafirmado que las municipalidades deben tener la última palabra sobre la altura de los edificios.