Un paciente internado por coronavirus, tras ganarle la batalla a la COVID-19 está asfixiado económicamente y sumido en la desesperación por las tarifas pendientes por pagar al ser atendido en la clínica San Felipe. Su hijo piensa hasta vender su casa, su auto y dar en alquiler su farmacia para intentar pagar la exorbitante deuda de S./ 665.075 que debe por los gastos médicos que su padre de 69 años recibió en la Unidad de Cuidados Intensivos.
José Luis Tovar Reynoso es asegurado de EsSalud y en la quincena de abril empezó a presentar la sintomatología del coronavirus, tras agravarse su salud y con falta de oxígeno, sus familiares decidieron trasladarlo al hospital Rebagliati, pero no encontraron camas, por lo que la familia lo ingresó a la sala de emergencias de la clínica San Felipe en el distrito de Jesús María.
El paciente debe pagar por los siguientes gastos: S./ 234.725 soles en medicinas, S./ 88.467 soles en material quirúrgico, S./ 150.750 soles en gastos de medicina intensiva y honorarios médicos.