Un sismo de 7,4 grados en la escala de Richter sacudió la región de Nueva Bretaña, al este de Papúa Nueva Guinea. El epicentro se situó a 133 kilómetros al suroeste de la ciudad de Kokopo y a una profundidad de 63 kilómetros.
Tras este fuerte sismo, el Centro de Alertas por Tsunami del Pacífico alertó de la posibilidad de olas de entre 0,3 y 1 metro en algunas partes del litoral papuano y descartó cualquier riesgo en otras zonas.
La isla de Nueva Guinea, cuya mitad occidental pertenece a Indonesia, se asienta sobre el "Anillo de Fuego del Pacífico", una zona de gran actividad sísmica y volcánica que es sacudida al año por unos 7.000 temblores, la mayoría moderados.