Durante la Audiencia General realizada hoy en la Plaza de San Pedro, el Sumo Pontífice aseguró que la Cuaresma "es un tiempo fuerte, en el que estamos llamados a vivir, como elementos esenciales, una fe auténtica, conversión y apertura de corazón a los hermanos".
La Cuaresma dura 40 días; comienza el Miércoles de Ceniza y termina antes de la Misa de la Cena del Señor del Jueves Santo. Este periodo es considerado como tiempo para que los fieles católicos se arrepientan de sus pecados e inicien el cambio para ser mejores personas.