Al menos 46 civiles, entre ellos 13 niños, murieron este sábado en un bombardeo con barriles de explosivos en Alepo, en el norte de Siria, país en donde más de 136 mil personas han muerto desde el inicio del conflicto en marzo de 2011.
Estos nuevos ataques del ejército sirio se producen al día siguiente del cierre de la primera ronda de negociaciones de paz entre la oposición y el régimen sirio en Suiza, que concluyeron sin ningún resultado.
"Cuarenta y seis mártires murieron, entre ellos treces niños y cinco mujeres, cuando helicópteros del ejército sirio lanzaron barriles llenos de explosivos en varios barrios del este de Alepo", afirmó el director del Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), Rami Abdel Rahman.
Hasta el momento enero ha sido uno de los meses más sangrientos desde que inició el conflicto, según el director de esta ONG con base en Gran Bretaña pero que se basa en un amplia red de activistas y fuentes médicas en toda Siria.