Un grupo armado extremista irrumpió en un lujoso shopping de Nairobi y abrió fuego indiscriminadamente. Hasta el momento, el ataque ha dejado 39 muertos y 150 heridos, además de rehenes en el interior.
Los rehenes permanecen secuestrados en el recinto comercial, uno de los más concurridos de Nairobi, seis horas después del asalto, que no ha sido reivindicado oficialmente por ninguna organización, aunque el grupo extremista somalí Al Shabab reconoció implícitamente su vinculación en su cuenta de la red social Twitter.
De inmediato, efectivos del ejército de Kenia llegaron al centro comercial para reforzar a las fuerzas policiales que había en el lugar y comenzar con la evacuación de los heridos.
Podría ser el atentado más sangriento desde el ataque de Al Qaeda, que tuvo como objetivo en agosto de 1998 la embajada estadounidense de Nairobi y causó más de 200 muertos.