Detrás de la histórica campaña de Croacia en el mundial Rusia 2018 se encuentra un hombre de fe. Se trata de Zlatko Dalíc, el hacedor del sueño croata. Dirigiéndolos con un rosario en el bolsillo, el entrenador bosnio de 51 años no solo exhibe su don de mando, sino que también es un fiel creyente y un símbolo de la perseverancia.
Por ello, muchas veces aparece con la mano dentro del bolsillo. La razón es que Dalíc de pequeño fue monaguillo de un monasterio franciscano, cerca de su casa en la localidad de Gorica. Debemos saber que el hoy entrenador de los balcánicos nació en Livno, actualmente Bosnia – Herzegoniva, país con el que los croatas estuvieron en guerra entre 1992 y 1994.
Dalíc apareció en esta selección en 2017 en un momento en que su clasificación pendía de un hilo y hoy el hombre de la fe los lleva a jugar la final de la copa.