Jugar a la soga dejó de ser un entretenimiento que solo realizaban los seres humanos. Ahora un robot ha logrado demostrar que se puede puede imponer su marca en el conocido juego. Jumpen, un robot construido en el Instituto Nacional de Tecnología Nara College En Chiba, Japón, logró perpetuarse en el Récord Guinnes.
El simpático robot tiene forma de pingüino y se vale de una suerte de pata retráctil para poder elevarse del suelo y lograr simular un salto. Para la prueba se utilizó una pantalla de televisión gigante donde se contabilizaban los saltos del pingüino electrónico.
Jumpen logró realizar 106 saltos de forma satisfactoria. Para que se pueda contabilizar el brinco del robot la soga tuvo que dar un giro completo de 360°. El suceso tuvo lugar en el Robocom, organizado por la cadena de televisión japonesa NHK, en el centro de convenciones Makuhari Messe.
