¿Por fin llegó el futuro? Estamos en el año 2017 y, aunque nuestros abuelos lo soñaron, aun no cumplimos la fantasía de los autos voladores. Sin embargo, lo que tenemos son drones… y tal parece que lo más cerca que llegamos por ahora es esto.
En efecto, se trata de un sistema de ‘entregas voladoras’ en Estonia que utiliza drones para que recibas cómodamente algo tan banal y cotidiano como una cerveza (al mejor estilo de ‘Los Supersónicos’), aunque cabe señalar que el sistema aún está a prueba.
Y tampoco es que sea exactamente igual. El drone no vendrá volando con tu pedido hasta donde estés. Luego de enviar un mensaje desde tu celular, el drone llegará hasta una ‘cápsula’, punto donde deberás recogerlo y que busca que el cliente tenga el menor contacto posible con la máquina.
El sistema se encuentra a la espera del marco legal de la Unión Europea que regule este tipo de entregas. Hasta entonces ¿crees que la idea tendrá éxito?