El Nokia 3310 volvió, pero ¿es lo que esperábamos?

Finalmente está aquí: el Nokia 3310, el teléfono indestructible y toda una leyenda de la era ‘pre smartphone’ ha vuelto. El producto fue presentado en el Mobile World Congress de Barcelona por la finlandesa HMD, quien tiene las patentes, derechos de marca e imagen de la antigua empresa.

El Nokia 3310 estará disponible en la segunda mitad de este año por unos 50 dólares y en cuatro colores para escoger, a diferencia del original blanco y negro. Del baúl de los recuerdos ha traído características como la tremenda duración de su batería y su clásico ‘snake’.

En efecto, el celular se luce con una de sus ventajas más apreciadas que incluso se ha mejorado: una sola carga equivale a 22 horas de llamadas o un mes entero prendido, 10 veces más que el aparato original.

Tiene también cámara de 2 megapíxeles con flash led, pantalla de 2,4 pulgadas, radio FM y los tonos característicos que todos volveremos a oír. Sin embargo, desde el saque ya muchos han emprendido un debate de pros y contras que va a levantar polvo.

¿Qué nos permite el nuevo 3310?

Hacer llamadas, enviar mensajes SMS, tomar fotos, aunque en baja calidad, oír la radio y almacenar música (como MP3 es bastante bueno, con 51 horas de reproducción garantizadas, además se puede usar auriculares normales o inalámbricos Bluetooth).

Sus funcionalidades además incluyen calendario, alarma, notas de voz o escritas, calculadora y el pronóstico del tiempo. Sus juegos (¡Snake!), la navegación por Internet con Opera. Sin embargo, otras características que antes fueron su fuerte, hoy no lo son tanto. Y estas también han vuelto.

¿Qué no nos permite?

En primer lugar tiene un teclado alfanumérico.  Presionar botones una y otra vez para obtener una simple letra es algo que la nueva generación había superado y hoy nadie quiere. Además su conexión a Internet es GPRS, muy lenta y solo recomendada para emergencias.

Es más, las redes 2G que utiliza el móvil son obsoletas en varias partes del mundo (de hecho, hasta la 3G empieza a quedar en el pasado). En países como Canadá y EE.UU. solo quedaría ver la forma de adaptar el aparato si es que se pretende comercializar, según indica PlayGround.

Tampoco tiene GPS (aunque esto para muchos es una ventaja de privacidad). No se puede acceder a redes sociales como WhatsApp (¿otra ventaja?) ni instalar aplicaciones. Sí se puede usar Bing Search, Facebook o GroupMe, aunque con limitaciones. No se puede acceder a WiFi.

Probablemente ni Opera ni el hardware de este celular permitan reproducir videos, así  que también podemos darlo por descartado.

¿Entonces, para qué serviría el 3310? Tampoco hay que ser mezquinos, por eso páginas como Gizmodo señalan que hay opciones “muy interesantes” como cuando uno quiere ir de viaje a lugares donde no hay electricidad para cargar celulares y se necesita equipo ligero.

La gran pregunta es si será igual de ‘indestructible’ que su predecesor. El portal Xataka cree que la tecnología inevitablemente vuelve todo más frágil, así que es probable que no. Además en su presentación nunca se habló de este factor.

Tampoco está nada mal como un regalo para personas mayores que no gustan de los smartphones. Finalmente, si te sientes ‘intoxicado’ por la rutina y la tecnología de estos tiempos siempre podrás acudir al ‘viejo confiable’ y recordar tiempos más simples y geniales.