Un estudio realizado en China ha descubierto que las mujeres que comen mayor cantidad de fibra en su dieta tienen un 11% menos de probabilidades de sufrir cáncer de mama. Para los investigadores estos resultados tienen bastante sentido, ya que al llevar una dieta rica en fibra, se reducen los estrógenos, los cuales en altos niveles son un factor de riesgo en lo que a cáncer de mama se refiere.
Cabe indicar que esta demostrado que el riesgo de padecer el cáncer de mama en las mujeres que tienen madre o hermana con dicha enfermedad es 2 ó 3 veces superior al resto de la población. Es decir, del 5 al 10 por ciento son causados por mutaciones genéticas y son hereditarios. Por tal motivo las mujeres que tienen familiares con cáncer de mama deben estar más predispuestas a realizarse chequeos constantes para preservar intacta su salud.
Además para que los resultados del estudio fueran más fiables, lo que hicieron fue combinarlos con los resultados de diez investigaciones anteriores. De las más de 700.000 mujeres estudiadas, un 2,4% tuvo cáncer de mama, pero aquellas que más consumían fibra tuvieron un 11% menos probabilidades de sufrirlo.
“La fibra contiene antioxidantes y vitamina E que ayuda a retardar el proceso de alteración de las células y mejora el sistema. No se puede afirmar que comer fibra reduce el riesgo de cáncer; sin embargo, las mujeres que comen más fibra tienen un menor riesgo de sufrir la enfermedad”, sostuvo la especialista en ginecología y obstetricia de ONCOGYN, Bertha León Goicochea.
Si bien es cierto, el consumo de fibra no es la solución al problema del cáncer de mama; sin embargo, ayuda a prevenirlo. Por ello, es indispensable agregar a nuestra dieta frutas, verduras y granos integrales que son alimentos ricos en fibra que nos ayudarán a prevenir la aparición de diversas enfermedades.
