Salud

Jueves, 23 de junio del 2011

Residentes en las ciudades son propensos a la esquizofrenia

Los residentes urbanos presumiblemente no se sorprenderán de saber que vivir en ciudades grandes puede ser perjudicial para la salud mental.

Residentes en las ciudades son propensos a la esquizofrenia

Los residentes urbanos presumiblemente no se sorprenderán de saber que vivir en ciudades grandes puede ser perjudicial para la salud mental.




Los residentes urbanos presumiblemente no se sorprenderán de saber que vivir en ciudades grandes puede ser perjudicial para la salud mental.

Ahora los investigadores han hallado un posible motivo. Las tomografías demuestran que en los ciudadanos urbanos o en las personas que se criaron en ambientes urbanos, determinadas áreas del cerebro reaccionan más enérgicamente al estrés.

Eso podría explicar por qué la vida en la ciudad puede aumentar los riesgos de esquizofrenia y otros trastornos mentales, dijeron los estudiosos.

Investigaciones anteriores hallaron que criarse en una ciudad grande aumenta el riesgo de esquizofrenia y hay algunas evidencias de que los urbanos corren mayor riesgo de trastornos del ánimo y ansiedad, aunque las pruebas no son concluyentes.

En todo caso, los voluntarios examinados en el nuevo estudio eran saludables y los expertos dijeron que, aunque las diferencias urbanas-rurales en la actividad cerebral eran curiosas, los resultados no establecen un vínculo firme con enfermedades mentales.

El estudio, efectuado en Alemania y publicado en la edición del jueves de la revista Nature, se centró en el modo en que el cerebro reacciona al estrés causado por otras personas.

Para hacerlo, los investigadores hicieron que los voluntarios se tendieran en un escáner cerebral y resolvieran problemas de matemáticas. Los voluntarios anticipaban problemas sencillos, pero por cierto eran suficientemente difíciles como para que cada uno de ellos se equivocara en la mayoría.

Durante su estada en el escáner, los voluntarios oían a un investigador criticar su desempeño, diciendo que le parecía sorprendentemente flojo y decepcionante y que quizás no tuvieran la habilidad suficiente como para participar.

Un estudio inicial con 32 voluntarios detectó diferencias urbanas-rurales en dos áreas del cerebro. Una era la amígdala, que reacciona a las amenazas en el ambiente y la otra el circuito que regula la amígdala.

Los investigadores hallaron que los voluntarios de ciudades de más de 100.000 habitantes revelaban mayor actividad de la amígdala que los de más de 10.000 y éstos a su vez más que la gente de las áreas rurales.

Para atribuir todo efecto al lugar donde se habían criado los sujetos del estudio, los investigadores asignaron a cada uno una puntuación de "grado de urbanidad" basado en cuantos años habían pasado en una ciudad, pueblo o zona rural hacia los 15 años.

Mientras mayor la puntuación, mayor era su niñez en zonas urbanas y mayor la actividad registrada en el circuito regulador de la amígdala durante el experimento.

Un examen de estrés ligeramente diferente produjo resultados similares con un grupo diferente de 23 voluntarios.

Sin embargo, cuando los voluntarios de un tercer grupo de 37 adultos efectuaron tareas mentales sin ser criticados por un desempeño pobre, no demostraron diferencias urbanas-rurales. Eso indica que el efecto se debe a las críticas más que a la tarea, dijeron los investigadores.

El estudio no puede revelar por qué la vida en la ciudad refuerza las respuestas cerebrales, pero podría deberse al estrés causado por tener que lidiar con las demás personas, conjeturó el doctor Andreas Meyer-Lindenberg, director del Instituto Central de Salud Mental en Mannheim, Alemania y autor central del estudio.

 


Temas Relacionados: CiudadEsquizofreniaSalud Mental

También te puede interesar:

DENGUE