Los riñones cumplen funciones vitales en el organismo, como filtrar toxinas y regular minerales esenciales. Sin embargo, ciertas prácticas diarias pueden afectar su funcionamiento sin que las personas lo noten. Según el nefrólogo Mauricio Arvizu, muchas personas creen que beber agua es suficiente para cuidar los riñones, pero en realidad hay múltiples factores que pueden deteriorar su salud a largo plazo.
A continuación, presentamos 10 hábitos que pueden afectar tu función renal y cómo evitarlos.
1. Consumo excesivo de sal
El sodio en exceso eleva la presión arterial y sobrecarga los riñones. "Siempre recomendamos moderar el consumo de sal, ya que su abuso puede acelerar el deterioro renal", explicó el galeno a Excelsior México. Alimentos ultraprocesados, embutidos y botanas saladas son los principales responsables de un consumo desmedido de sodio.
2. Uso frecuente de antiinflamatorios
Medicamentos como el ibuprofeno y naproxeno pueden ser peligrosos si se consumen de forma constante. "El uso crónico de antiinflamatorios no esteroides afecta la filtración renal y, en algunos casos, acelera la insuficiencia renal", advierte el especialista.
3. Falta de control de la presión arterial
La hipertensión es una de las principales causas de enfermedad renal. "El control de la presión arterial es fundamental, ya que si se mantiene elevada por mucho tiempo, daña los vasos sanguíneos de los riñones", indica Arvizu.
4. Consumo excesivo de alcohol y tabaco
"El tabaquismo y el consumo excesivo de alcohol afectan la circulación sanguínea hacia los riñones y dificultan su función", señala el nefrólogo. Estos hábitos están vinculados a un mayor riesgo de desarrollar enfermedades renales crónicas.
5. Niveles elevados de azúcar en sangre
La diabetes es una de las principales causas de insuficiencia renal. "El azúcar en sangre elevado afecta los pequeños vasos sanguíneos de los riñones y puede provocar insuficiencia renal a largo plazo", advierte el especialista. Para evitarlo, es clave mantener una dieta equilibrada y realizar chequeos periódicos.
6. Falta de chequeos médicos
Las enfermedades renales no suelen presentar síntomas en sus primeras etapas, lo que dificulta su detección. "Hacerse estudios de sangre y orina regularmente es clave para detectar problemas antes de que se agraven", recomienda Arvizu.
7. Hidratación inadecuada
Aunque no es el único factor determinante, no beber suficiente agua puede afectar la función renal. "El consumo adecuado de líquidos es un punto central en la prevención de enfermedades renales", señala el especialista.
8. Sedentarismo
El ejercicio físico regula la presión arterial y el peso, factores fundamentales para la salud renal. "El ejercicio mejora la circulación sanguínea y reduce el riesgo de enfermedades crónicas, incluyendo la insuficiencia renal", explica Arvizu.
9. No tomar agua cuando el cuerpo lo pide
Muchas personas ignoran la señal de sed por la rutina diaria. "No es necesario beber ocho vasos al día, pero solo tomar uno o dos puede ser insuficiente y afectar la presión arterial", advierte el especialista.
10. Automedicarse
El uso sin supervisión de ciertos medicamentos, como antibióticos o fármacos para la presión, puede ser perjudicial. "Algunos medicamentos favorecen la hiperpotasemia o la insuficiencia renal, por lo que siempre deben tomarse bajo prescripción médica", indica el nefrólogo.