Con el inicio del año escolar 2025, miles de niños y adolescentes regresarán a las aulas con mochilas llenas de útiles y libros. Sin embargo, cargar una mochila inadecuada o mal distribuida puede generar serios problemas en la espalda. Para evitarlo, la especialista en rehabilitación pediátrica, Dra. Mabel Ramírez, brinda recomendaciones sobre cómo elegir y usar correctamente una mochila escolar.
LAS CLAVES PARA EVITAR LESIONES
La elección de una mochila escolar va más allá del diseño. La Dra. Ramírez señala que el peso total de la mochila no debe exceder el 10% o 15% del peso corporal del niño. Por ejemplo, si un estudiante pesa 40 kg, su mochila no debería superar los 6 kg.
La distribución interna también es crucial. Los objetos más pesados deben colocarse lo más cerca del cuerpo, en la parte posterior de la mochila, para reducir la tensión en la espalda y mantener una postura adecuada.
MOCHILAS CON RUEDAS Y AJUSTE DE ASAS
Las mochilas con ruedas pueden ser una alternativa práctica, pero su uso incorrecto puede generar esfuerzo innecesario. La especialista recomienda que, si el modelo tiene cuatro ruedas, el niño la lleve al costado. En cambio, si tiene solo dos ruedas, es preferible empujarla en lugar de jalarla para evitar tensión en la espalda.
Para las mochilas de dos asas, se recomienda que sean acolchadas y ajustables, cubriendo toda la espalda hasta la zona lumbar. Además, contar con un cinturón ajustable en la parte delantera ayuda a fijar mejor la mochila al cuerpo, favoreciendo una mejor postura.
Tomar en cuenta estos detalles al elegir una mochila escolar permitirá que los niños inicien el año académico con mayor comodidad y sin riesgos para su salud.
