Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) han emitido una alerta sobre el incremento de la actividad del parvovirus B19, comúnmente conocido como la quinta enfermedad.
Este virus, que se transmite a través de gotitas respiratorias, había visto reducidas sus infecciones gracias a las medidas preventivas contra el COVID-19.
Sin embargo, recientes informes indican un aumento significativo en la tasa de positividad, especialmente entre los niños de 5 a 9 años, y un notable declive en la inmunidad de la población debido a la reducción de la circulación del virus en los últimos años.
COMPLICACIONES
Los CDC han destacado un incremento en los informes de complicaciones graves asociadas al parvovirus B19. Este incremento es particularmente preocupante para las personas embarazadas, quienes pueden enfrentar complicaciones como anemia fetal grave o aborto espontáneo.
Además, las personas con enfermedades hemolíticas como la anemia falciforme o aquellas con sistemas inmunológicos debilitados están en riesgo de desarrollar anemia aplásica, un trastorno sanguíneo grave y potencialmente mortal. La tasa de infección reciente, indicada por la presencia de anticuerpos, ha mostrado un preocupante aumento del 3% en 2022 a 10% en junio de este año.
PREVENCIÓN
Aunque no existe una vacuna disponible contra el parvovirus B19 ni un tratamiento específico más allá del manejo de síntomas, los CDC recomiendan mantener las precauciones generales para enfermedades respiratorias.
Esto incluye lavado frecuente de manos, limpieza de superficies comunes, y prácticas adecuadas de etiqueta respiratoria como cubrirse al toser o estornudar.
Es esencial que las personas con síntomas se mantengan alejadas de otros hasta su recuperación y que las personas en grupos de alto riesgo tomen precauciones adicionales, como el uso de mascarillas en entornos de riesgo y buscar atención médica de manera oportuna al presentar síntomas.