Un estudio publicado por la revista 'PLOS ONE', por la investigadora Heather Francis, de la Universidad de Macquarie, en Australia, demostró que los adultos jóvenes con depresión, cuya dieta generalmente no es saludable, mostraron significativamente menos síntomas de depresión después de comer una dieta saludable durante tres semanas.
Si bien muchas investigaciones demostraron que comer una dieta saludable rica en frutas, verduras, pescado y carne magra se asocia con un menor riesgo de depresión, hubieron muy pocos ensayos controlados aleatorios que examinen directamente el vínculo entre los dos, incluso para adultos jóvenes, quienes están estableciendo sus patrones de salud y también tienen un mayor riesgo de depresión.
Para el estudio se necesitó a 76 estudiantes universitarios (de 17 a 35 años) que presentaban síntomas de depresión de moderada a alta y seguían una 'dieta pobre' según la Guía australiana para una alimentación saludable (alta en alimentos procesados, azúcar y grasas saturadas).
Luego aleatorizaron a los participantes en dos grupos, uno de 'cambio de dieta' y otro de 'dieta habitual'. El grupo de cambio de dieta recibió instrucciones breves sobre cómo mejorar su dieta, así como una cesta de alimentos saludables.
En tanto, el grupo de dieta regular no recibió ninguna instrucción y simplemente se les pidió que regresaran después de las tres semanas. Antes y después de la intervención, los investigadores evaluaron las puntuaciones de los participantes para depresión, ansiedad y estado de ánimo general.
Al final de las tres semanas, el grupo de cambio de dieta había mantenido con éxito una dieta saludable y mostró una mejora significativa en el estado de ánimo, con los puntajes de depresión cambiando al rango normal. Los puntajes de depresión del grupo de dieta habitual se mantuvieron estables en el rango de moderado a alto.
