Tras varios meses de indagación, la Fiscalía afirmó que Hwang malversó cerca de 3 millones de dólares de los presupuestos destinados a la investigación científica y que dirigió la manipulación de datos de los estudios publicados en 2004 y 2005 en la revista Science.
"Hwang pidió a su equipo que falsificara varios datos, incluyendo fotografías, el número de células madre creadas y los resultados de las pruebas de ADN que se publicaron en (la revista científica) Science en 2004 y 2005", dijo el fiscal Lee In Kyu en una rueda de prensa.
Hwang podría ser condenado a varios años de prisión. No obstante, los fiscales rechazaron solicitar una orden de detención.
En marzo el gobierno denegó a Hwang, antaño considerado héroe nacional, el permiso para investigar con células madre y la Universidad Nacional de Seúl le retiró su cátedra.
El científico, de 53 años, se disculpó públicamente en enero por su actuación. Sin embargo, pese a que asumió la responsabilidad de utilizar datos falsificados, declaró haber sido víctima de un complot.
Junto con Hwang también fueron incriminados otros cinco científicos que trabajaron con él en la investigación.