El balón intragástrico está hecho a base silicona y se coloca en el estómago en sólo 30 minutos sin alguna intervención quirúrgica, lo que quiere decir que el proceso es similar a una endoscopia.
Las sustancias que se llenan dentro del balón darán al organismo la sensación de saciedad o de llenura, haciendo que el consumo de alimentos sea sólo el requerido, por lo que se inicia la disminución del peso.
Los especialistas del Instituto Oncológico de Lima han implementado un staff de profesionales, integrado por psicólogos, nutricionistas y fisioterapeutas, quienes supervisarán a los pacientes que se someten a dicho tratamiento.
Explicaron que luego de este proceso, el paciente tendrá un estilo de vida adecuado, pues durante ese tiempo no sólo ha ingerido menos comida, sino que se ha educado en cuanto a alimentación, actividad física y conducta emocional.
El tratamiento del balón intragástrico se inició en Francia la década pasada, luego llegó al Brasil y ahora, a través del médico Gustavo Gálvez, director del Instituto Oncológico de Lima, se introduce en el Perú.
