Un brote de hepatitis en cientos de personas se sumó a las epidemias de gripe aviar y de fiebre aftosa, que hasta ahora no involucran a seres humanos en Rusia, informó una fuente de salubridad local.
Un brote de hepatitis en cientos de personas se sumó a las epidemias de gripe aviar y de fiebre aftosa, que hasta ahora no involucran a seres humanos en Rusia, informó una fuente de salubridad local.
El número de afectados por la enfermedad contagiosa del hígado continúa creciendo en Nizhni Novgorod, y ya suman 413 los hospitalizados, entre ellos 65 niños, confirmó Vladimir Lazariev, director del departamento urbano de Salud Pública en esa región.
El Servicio Federal de Inspección en la esfera de la defensa de los derechos del consumidor y el bienestar, por su parte, consignó que en las últimas 24 horas se registraron casos de la infección en 25 áreas comerciales del distrito.
En las últimas semanas el extremo oriental ruso fue afectado por el virus aviar y la fiebre aftosa, que provocaron el sacrificio de miles de animales.
Los veterinarios detectaron la semana pasada más de 100 nuevos casos de aftosa en Primorye, a pesar de las férreas medidas para confinar la epidemia, reportó el Centro de Emergencias del Lejano Oriente ruso.
Unas mil reses fueron sacrificadas en medio de extremas medidas de seguridad biológica en Prymorie, y se lleva a cabo una segunda vuelta de la inmunización contra la variante del virus conocido como Asia-1.
Simultáneamente se inició la vacunación de los cerdos, consignó el Primer Canal de la televisión.
Juristas rusos se proponen presentar una denuncia ante la Oficina del Fiscal General de esta Federación por la ineficacia ante la epidemia que invade al extremo Oriente de la Federación rusa.
Abogados de Primorye criticaron a las autoridades por el mal manejo del brote y demandaron una investigación judicial acerca de sus causas.
La reacción lenta de las estructuras federales correspondientes y la completa ignorancia en la capital de las señales de alarma emitidas desde esta región provocaron graves consecuencias, denunciaron, citados por ITAR-TASS.
El problema principal, señalaron, fue la demora deliberada de la llegada de las vacunas.
Durante un brote registrado en junio en la vecina localidad de Amur, añaden, las autoridades regionales de Primorye solicitaron al ministerio de Agricultura suministrara las dosis necesarias para impedir la expansión de la epidemia.
Sin embargo, las primeras llegaron cuando ya el mal afectaba a un número considerable de animales, señalan.
La gripe del pollo, asimismo, no pudo ser evitada por falta de recursos, dijo el subdirector del Centro Científico Estatal de Virología y Biotecnología para el Control de Vectores Serguei Netesov, citado por RIA Novosti.
Pudimos detectar el virus dos meses antes, cuando las aves volaron hacia Siberia desde el sur del continente asiático. Esto nos hubiera facilitado atajar la situación en desarrollo y anticipar las medidas antiepidémicas.
Nosotros esperábamos su llegada este año o el próximo, afirmó Netesov, tras informar que los especialistas de su institución monitoreaban el avance hacia occidente de la gripe aviar desde hace un trienio.
Las aves migratorias del sudeste asiático trajeron el virus y propiciaron el avance de una epidemia por la vía del territorio de Rusia, concluyó.
La influenza aviar se detectó en la provincia de Altai, Omsk, Novosibirsk, Tyumen, Kurgan, Cheliabinsk y Kalmikia.
(Agencias)