Llegó el verano y con él la importancia de proteger nuestra piel y la de los más pequeños. El sol es beneficioso y necesario para los niños pues estimula la síntesis de vitamina D, favorece la circulación sanguínea y actúa en el tratamiento de algunos problemas de la piel. Pero es importante saber dónde está el límite, la piel de los niños es más delicada que la de un adulto y una sobreexposición puede ocasionarles problemas de salud y patologías en la piel.
A continuación el Dr. Gilmar Grisson, Cirujano Oncólogo de la Liga Contra el Cáncer, brinda algunas recomendaciones para proteger la piel de los infantes durante este verano.
- Todo recién nacido debe protegerse de la luz directa del sol hasta los 6 meses de vida y evitar llevarlos a la playa hasta después de cumplidos los 2 años, pues su piel es muy sensible y aún no han desarrollado plenamente su capacidad para segregar melanina, el pigmento que protege la piel.
- Los vidrios de las ventanas no están diseñados con filtros contra los rayos ultravioleta, por lo que las cunas de los bebes no deben estar cerca de las ventanas. Esto no quiere decir, que debemos tenerlos en un cuarto oscuro, ya que como dijimos al inicio, la luz solar es importante, puede protegerlos del sol, poniéndoles ropa fresca de colores claros, como politos manga larga, sombreros o gorrito de ala ancha y anteojos de sol con protección UV.
- Los niños tienen que usar bloqueadores recomendados por especialistas, los cuales deben contener filtros contra los rayos ultravioleta A y B, mínimo factor SPF 50 y deben ser usados de la misma forma que los adultos 30 minutos antes de exponerse al sol y renovarlos cada 2 horas, apenas transpire, realice algún deporte, juegue o se ingrese a la piscina o playa.
- Evitar exponer la piel de los niños e incluso la de los adultos desde las 12 del mediodía hasta las 3 pm, horas críticas en donde la radiación es mucho más peligrosa para la salud.
- Asimismo, los padres también tienen la opción de proteger la piel de los pequeños a través de la nutrición, pues gracias a las vitaminas A, C, E, antioxidantes, proteínas y las verduras frescas se puede reparar el daño producido por los rayos ultravioletas.
Al igual que los niños, todos los adultos en general deben aplicarse bloqueador media hora antes de salir y exponerse a la radiación UV, solo así, se creará una cultura preventiva para evitar el cáncer de piel teniendo en cuenta que el 95% de los casos detectados a tiempo tienen cura.
