Científicos del Colegio Médico Weill Cornell de Estados Unidos crearon una vacuna que evita que la nicotina llegue al cerebro y así evita que el fumador sienta placer.
Los investigadores afirman que una sola dosis protegió a los ratones –usados en los experimentos- de la adicción a la nicotina de por vida. Si los resultados se mantienen, el tratamiento sería útil para ayudar a dejar el hábito a los fumadores.
En las pruebas, utilizaron el hígado de los roedores para producir los anticuerpos que atacan efectivamente a la nicotina en el instante en que la droga entra al torrente sanguíneo, de esa manera evita que llegue al cerebro.