Investigadores de la Universidad de Pennsylvania descubrieron una proteína en la alopecia androgénica, la forma más común de calvicie, que afecta a millones de caballeros en todo el mundo.
“La proteína que hemos identificado parece ser la principal inhibidora del crecimiento del cabello en las zonas de la cabeza afectadas por la calvicie”, declaró George Cotsarelis, director de la investigación a la revista Science Translational Medicine.
Los investigadores han analizado la actividad de más de 20.000 genes en el cuero cabelludo de cinco hombres de entre 40 y 65 años que se habían sometido a un trasplante capilar, comparando los genes activos en la zona poblada de cabello con los de la zona despoblada.
La comparación y estrategia ha permitido identificar una proteína mucho más abundante en la zona que había quedado calva: la prostaglandina D2 (PGD2).
Los científicos han demostrado que la PGD2 impide el crecimiento del cabello porque interactúa con un receptor llamado GPR44. El interés de este receptor radica en que ya existen una serie de medicinas experimentales capaces de combatirlo.
Estos fármacos que se están investigando, según George Cotsarelis, aplicados como crema sobre el cuero cabelludo, podrían impedir que la proteína PGD2 se asocie con el repector GPR44 y bloquee el crecimiento del cabello.