Hace unos días se difundió una noticia de un caso en Santa Anita de un niño de 14 años que había retenido contra su voluntad a una pequeña de 3 años, según los medios la niña estaba en el parque y la madre se había ido a comprar un rato y en cuestión de segundos, el otro menor que responde al nombre de Willington se la habría llevado.
Luego apareció la niña sana y salva, pero este caso dio revés al saber que Willington es un menor autista, un niño con habilidades diferentes, sin ninguna maldad en su ser.
Esta mañana un grupo de madres de familia llegó hasta la Esquina de la Televisión, para pedir que todos seamos más empáticos y más solidarios con respeto a una condición invisible como es el autismo.
“Los niños no verbales o no hablantes autistas son vulnerables, hoy fue Willington mañana puede ser tu hijo” dice uno de los carteles que estas valientes madres llevan para levantar y hacer escuchar su voz.
También lamentaron que el gobierno y las autoridades no se preocupen por los niños y adolescentes con los trastornos del espectro autista (TEA), a lo que se suma la falta de tolerancia de las personas.
Los trastornos del espectro autista (TEA) son discapacidades del desarrollo causadas por diferencias en el cerebro. Las personas con TEA con frecuencia tienen problemas con la comunicación y la interacción sociales, y conductas o intereses restrictivos o repetitivos.
EL grupo de señoras enfatizó que es común que los niños con un trastorno del espectro autista no puedan hacer gestos (como señalar un objeto, por ejemplo) para dar significado a lo que dicen y por lo general, evitan el contacto visual, lo que los hace parecer maleducados, desinteresados o distraídos, cuando no lo son, de allí la importancia de la tolerancia y la comprensión.
