Un día como hoy, hace 18 años, el Perú perdió a una de sus artistas más queridas: la Muñequita Sally, nombre artístico de Sara Haydee Barreto Retuerto, quien falleció en un trágico accidente automovilístico el 27 de mayo de 2007, un día antes de su cumpleaños número 38.
LA MUÑECA DEL PUEBLO
Nacida el 28 de mayo de 1969 en Huaral, Sally mostró desde niña un talento excepcional para el canto. A los seis años ya se presentaba en escenarios, pero fue en los años 80 cuando alcanzó la fama al integrarse al grupo Pintura Roja. Con ellos incursionó en la música chicha y ganó reconocimiento a nivel nacional.
Más adelante, lanzó su carrera como solista retomando sus raíces andinas y adoptando el seudónimo que la haría inolvidable: Muñequita Sally. Su estilo único, que fusionaba huayno con cumbia, le valió el cariño del público con éxitos como Pisao pisao.
Su carrera se vio truncada cuando, tras una presentación en Huaral, el vehículo que la trasladaba a Lima chocó violentamente en Puente Piedra. El accidente cobró la vida de Sally y varios miembros de su agrupación. La noticia conmocionó al país y más de 20 mil personas asistieron a su sepelio. Diez días después, su madre, devastada por la pérdida, se quitó la vida y fue sepultada junto a ella.
“Lo que nos causa tristeza es ver que cuando el artista está en vida no lo valoran. Recién cuando muere todos lo escuchan, todos hablan de él”, declaró entonces uno de sus colegas.
En 2008, su historia fue llevada a la televisión en la miniserie Sally, la muñequita del pueblo, protagonizada por Mónica Sánchez. Desde entonces, su figura se ha convertido en símbolo de lucha, sensibilidad y autenticidad artística.
Hoy, su voz sigue sonando en las radios, las ferias populares y en la memoria de quienes crecieron con sus canciones. Su legado sigue vivo, recordándonos que hay artistas que, aunque partan, nunca mueren del todo.
