A más de 9 meses del fallido golpe de Estado perpetuado por Pedro Castillo, el expresidente mencionó que no buscaba asilarse en México cuando fue detenido por la Policía Nacional del Perú (PNP), sino que solo iba a dejar a su familia en la entidad.
Asimismo, contó que uno sus hijos quedaron impactados con el accionar de los agentes ya que en todo momento lo estuvieron apuntando con metralletas a todos.
"Cuando yo decido conducir a mi familia a la embajada de México por los hechos que venían sufriendo mis hijos y mi esposa, decido irme en el vehículo presidencial con Aníbal Torres para ir y volver. Pero, a la altura de la prefectura, detienen la movilidad y empiezan a apuntar con metralletas donde iba con mi esposa y mi hija. En el otro carro iba mi hijo Arnold. Ambas movilidades empezaron a apuntar (…). Cuando le pregunto a mi seguridad, me dice que hay una orden para conducirme a la prefectura", declaró.
NO INTENTE FUGAR
A pesar de que se le veía en un presunto escape hacia el país de Andrés Manuel López Obrador (AMLO), el exmandatario negó una vez más estas imputaciones en su contra y declaró que su detención fue parte de un complot en su contra.
"Todo esto es parte de un complot. Yo iba, no estaba fugando, no había fragancia. Yo estaba yendo a dejar a mi familia en la embajada de México porque el hostigamiento era muy grande. Hicieron un allanamiento en Palacio de Gobierno en horas de la noche. Encontraron a mis hijos dentro de su cama y ellos estaban traumados. Por eso es que frente a los hechos decido quedarme para solucionar los problemas que tiene el país y dejar a salvo a mi familia y a raíz de eso se genera este secuestro", sostuvo.
Finalmente, Pedro Castillo antes de iniciar sus declaraciones ante el Juzgado Supremo de Investigación Preparatoria se presentó como el máximo líder del Perú. "Señor magistrado, quien le habla es el presidente de la República, Castillo Terrones".
