El presidente de la República, Pedro Castillo, anunció ayer en horas de la tarde la creación de una oficina para los ronderos campesinos a fin de que fiscalicen su gestión, estas declaraciones se dan tras el pedido en horas de mañana de la Fiscalía en citar al jefe de Estado por la investigación de presunta injerencia en ascensos militares.
“Hemos dispuesto que, una vez gestada y transparentada la unidad de las rondas campesinas, abriremos una oficina al lado del despacho presidencial, no solo para luchar contra los flagelos que están afuera, sino para que controlen mi gobierno, para que vean si estoy robando, como dicen”, señaló en su discurso en el VI Congreso Nacional de las Rondas Campesinas.
En todo momento evito referirse a las investigaciones que inició el Ministerio Público en torno a personas allegadas a su gestión, como el caso del exsecretario presidencial, Bruno Pacheco, sin embargo, siguió insistiendo sobre el papel de las rondas campesinas en su gobierno.
“Me someto a las rondas campesinas para que hagan una investigación de mi gobierno. Cogerle un centavo a este país es ir contra la crianza de mis padres y de mi familia, y de mis hijos. ¿Cómo puedo meter la mano?”, señaló.
DESCONOCE LAS LEYES
Las críticas no se hicieron esperar y desde el Congreso, Alejandro Cavero (Avanza País) lamentó que el jefe de Estado, en los cuatro meses que ejerce funciones aun desconozca el “Estado de derecho”.
“Quien se encarga de perseguir el delito en el Perú es la Fiscalía, que por cierto está guardando bastante calma en torno a investigaciones que vinculan a Pedro Castillo. Los ronderos tienen la función de ayudar a la seguridad ciudadana”, manifestó a un diario local.
