Al cotejar ambos documentos, se dieron con la sorpresa de que en muchos casos se consignaba un nombre que no correspondía con el DNI ni la firma registrada.
Son los casos de Melitón Arredondo, Edwin Altamirano, Beatriz Barra de Béjar o Mario Quispe Checca, que aseguraron ante cámaras no tener ninguna relación con el FIM, pero cuyas firmas falsificadas aparecen en las actas.
Mientras, otros como Efraín Gomero, Toribio Deza o Adela Gamarra aseguran ser sólo simpatizantes del FIM, pero sus nombres figuran dentro de los planillones de militantes.
También aparecen nombres de trabajadores del gobierno regional del Cusco en los planillones, pero estos prefirieron no pronunciarse.
Y es que, según informó el referido programa, el 25 de setiembre del 2004 Carlos Cuaresma convocó a un grupo de 250 personas para que firmen las actas como si fueran del partido de la escoba.