Durante una de las audiencias de prisión preventiva por el caso Ángeles Negros, la exvoleibolista Cecilia Aróstegui defendió su inocencia frente a las acusaciones del Ministerio Público. Según la investigación, la mujer formaría parte de una organización criminal que cobraba más de 80 mil soles a familiares de pacientes con covid-19 para que accedan a una cama UCI.
Ante la sala, señaló que no integra una organización criminal y que solo buscó hacer un favor a una persona cercana.
“No conozco a ningún medico ni a ninguna enfermera. Si hicimos esto de acá fue una sola vez, nos pidió el favor para hacerle el favor a su amigo”, manifestó.
“Pido que haya humanidad, por favor, pido al fiscal que tenga humanidad, a donde nos mandan todas mis insulinas se malogran, me estoy muriendo en el penal”, añadió.
Asimismo, mencionó que ella usó la cuenta bancaria de su hijo, Sebastián Bazalar, quien también es investigado por este caso, sin su consentimiento para recibir los pagos.
