Su estrategia de defensa lo llevó a desconocer todo y a todos, a sus sobrinos, visitantes y amigos. El presidente de la República, Pedro Castillo aseguró ante la Fiscalía que cuando saltó a la luz el caso del puente Tarata, pidió de inmediato la renuncia de Juan Silva como ministro de Transportes y Comunicaciones, sin embargo, lo mantuvo tres meses más en el cargo.
Las revelaciones a nivel fiscal del mandatario son sorprendentes. El jefe de Estado aseguró que su presencia en la casa de Sarratea eran despedidas de agradecimientos a la familia del empresario Alejandro Sánchez Sanchez.
El presidente Pedro Castillo, no permite que se conozca con quién mantuvo comunicación, no autoriza que se sepa qué mensajes escribió ni cuáles recibió, él no está dispuesto a develar información que podría comprometerlo en la investigación.
