El actual Contralor de la República, Edgard Alarcón, ha estado en el ojo de la tormenta tras las acusaciones por haber adquirido 80 vehículos en más de 10 años. Ahora también aparece otro rubro que será parte de las investigaciones por lavado de activos, abierta en estos días por la fiscalía.
Sergio Dávila, congresista de Peruanos por el Kambio, quien tiene investigaciones fiscales por corrupción, durante su gestión en la alcaldía de Camaná del 2007 al 2010, decidió promover la propiedad y desarrollo inmobiliario en el Balneario de Arenillas, en Arequipa subastando varios terrenos.
Edgar Alarcón y su esposa ganaron en la subasta pública dos lotes playeros de 200 metros cada uno pagando por estos 10 mil soles. El gerente general de la Contraloría de la República en total adquirió 3 lotes en Camaná y uno en Chincha. Se trata de inversiones en terrenos que luego habría vendido a un conocido hotel.
Sin embargo, para ocupar un cargo del Estado no podría haber ingresado al negocio inmobiliario al vender una propiedad en Camaná. El punto central es que uno de los requisitos establecidos para ocupar el cargo es ser intachable.
