Los balnearios del sur de Lima han dejado de ser solo un destino estacional para las personas y se han convertido en una zona de expansión urbana y comercial. En los últimos años, el crecimiento demográfico ha impulsado el desarrollo de condominios y nuevas áreas urbanizadas en el llamado “Sur Chico”. Sin embargo, con este auge también han surgido problemas como el intenso tráfico vehicular, que afecta a quienes residen de manera permanente y a los visitantes de fin de semana.
Un equipo de Panorama constató que el flujo de personas hacia estas playas ya no se limita a los meses de verano, sino que muchas familias han optado por establecer su residencia definitiva en la zona. Según el experto en bienes raíces Sandro Vidal, de la consultora “Re Propiedad”, la demanda de viviendas en estos balnearios ha crecido significativamente, con cada vez más personas interesadas en adquirir propiedades para vivir durante todo el año.
Uno de los distritos con mayor desarrollo es Punta Hermosa, donde recientemente el exfutbolista Jefferson Farfán inauguró su moderno centro comercial “K40”. Este tipo de proyectos han potenciado la actividad económica y han consolidado la zona como un polo de crecimiento urbano. Durante los fines de semana, Punta Hermosa puede llegar a recibir hasta 60 mil visitantes, lo que evidencia su transformación en un punto clave de residencia y comercio.
NUEVOS DESAFÍOS PARA EL SUR
El desarrollo del sur de Lima plantea nuevos desafíos en infraestructura y planificación urbana. Mientras las inmobiliarias continúan expandiendo proyectos habitacionales, las autoridades deben afrontar la necesidad de mejorar la movilidad, el acceso a servicios y la preservación del entorno natural. Con un crecimiento sostenido, estos balnearios están dejando atrás su carácter exclusivo de destino turístico para convertirse en una alternativa real de vivienda.