Panorama recorrió en exclusiva los dos más grandes vertederos de la Costa Verde y comprobó que diariamente decenas de camiones arrojan gran cantidad de desmonte, afectando no solo las playas, sino también provocando contaminación en el mar.
Uno de estos puntos críticos es la playa Marbella, en Magdalena. Según pudimos verificar, cada camionero paga 50 soles por ingresar a este espacio público para descargar bloques de cemento, ladrillos y otros desperdicios de las construcciones.
Pero no es el único lugar. Otra zona afectada es Mar Brava, en San Miguel, hasta donde llegan camiones para arrojar desmonte sin que ninguna autoridad los fiscalice, lo que se traduce en un atentado ecológico que podría traer graves consecuencias.
ATENTADO ECOLÓGICO
Desde la Capitanía de Puertos informaron que los municipios no tienen autorización para que dispongan el arrojo de desmontes en el litoral. Además, anunció que realizará un trabajo de fiscalización para identificar y sancionar a los responsables.