El sicariato sigue cobrando más víctimas mortales en nuestro país. Se trata de asesinos a sangre fría que pese a las denuncias siguen burlando la ley. Son bandas criminales, integrada por delincuentes juveniles que no superan los 25 años y siembran el terror en el Callao y Ventanilla.
Muerte por encargo, distribución de droga, cobro de cupos y extorsión son los delitos con los que se nutre el sicariato en Perú.
Los familiares de las víctimas temen por sus vidas y aseguran vivir en zozobra y temor las 24 horas del día.