Las víctimas de los prestamistas que operan bajo la modalidad del 'gota a gota', denuncian amenazas, extrema violencia que va hasta el secuestro, incluso uno de ellos aseguró haber sido electrocutado, tortura que a la fecha le ha dejado secuelas psicológicas y no le permite vivir con tranquilidad.
Se trata de bandas criminales integradas por venezolanos, colombianos y peruanos, quienes son capaces de todo por cobrar los excesivos intereses. Estas organizaciones delincuenciales no permiten ni un mínimo de retraso en los pagos.
Con la llegada de la pandemia del coronavirus a nuestro país, varios empresarios recurrieron a estos préstamos sin aval y sin requisitos, con el fin de no declarar sus negocios en quiebra, sin embargo, nunca imaginaron que sus días se convertirían en una constante pesadilla.