Durante meses una banda de extorsionadores estuvieron despojando de sus bienes y pertenencias a dueños de farmacias, dueños de mercados e incluso taxistas a través del cobro de cupos, seis personas no pagaron y terminaron asesinadas brutalmente.
La zona era dominada por una banda criminal, uno de los integrantes estaba en libertad debido a un indulto presidencial por COVID-19. Se trata de un sicario que salió en junio bendecido por una norma presidencial, se le conmutó la pena y salió a seguir matando.
La sombra de los cupos extorsivos golpean y manchan de sangre las calles del distrito de Comas al mismo estilo que el Callao o San Juan de Lurigancho, donde sino pagas te mueres. Desde mototaxista, farmacias, restaurantes, mercados o cualquier negocio en el kilómetro 11 de Comas tiene que entregar dinero a cambio de una presunta seguridad.