La Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida), hará público en unos días su estudio del 2022 sobre el cultivo ilegal de la hoja de coca en Perú, pero advirtió que pese a los esfuerzos, el panorama no es alentador.
“Las comunidades nativas y las zonas protegidas ahora concentran la mayor tasa de crecimiento del cultivo de hoja de coca ilegal”. Precisó el presidente ejecutivo de Devida, Carlos Antonio Figueroa.
El presidente ejecutivo de esta comisión informó ante la Comisión Especial DEVIDA del Congreso, que “las zonas intervenidas han generado contención, pero la mayor tasa se da en bosques, áreas naturales protegidas, comunidades nativas, ese es el nuevo foco que debemos afrontar con preocupación y que debemos matricular para inyectar recursos de la cooperación internacional. Con solo recursos del Estado no lo podemos hacer”.
Durante la sesión, se reportó que entre los años 2021 y 2022 se detectó 12,000 hectáreas nuevas lo que representa un incremento en 36%. Además, la mayoría de las áreas afectadas se ubicarían en el Parque Nacional de Bahuaja Sonene, Cordillera Azul y Reserva Comunal El Sira.
Figueroa también señaló que, han firmado un convenio con Serfor y próximamente lo harán con el Organismo de Supervisión de los Recursos Forestales y de Fauna Silvestre (Osinfor) para trabajar de forma conjunta.