En medio de una audiencia judicial, el magistrado del caso interrumpió el debate para exigirle al abogado que se coloque el saco, pese a que usaba chaleco de terno. El letrado, lejos de responder afirmativamente, pidió al magistrado la base legal para exigirle el uso de dicha prenda, por lo que se inició un tenso intercambio de argumentos que distaban del caso de la audiencia.
El abogado cuestionado fue identificado como Ángel Daniel Ortiz Ayosa, quien era el abogado defensor del caso y cuando iniciaba su argumentación el magistrado le consultó por el saco.
Juez: Señor abogado, ¿su saco?
Abogado: No tengo a la mano un saco, señor magistrado, estoy con un chaleco.
Juez: Sí, ya lo sé, por eso le pregunto, ¿por qué no está con su saco?
Abogado: Señor magistrado, con todo respeto, ¿cuál es la base legal que usted está usando para poder solicitarme a mí, que me encuentro en esta audiencia con un saco?
Juez: ¿Base legal, señor? ¿Usted me está requiriendo que le diga dónde está la norma para que usted se ponga el saco en una audiencia judicial?
Abogado: Sí, señor magistrado.
Juez: No, señor, usted no me puede pedir la norma, usted debe saber, como abogado, que una de las fuentes del derecho es la costumbre. Y la costumbre dice que en una audiencia judicial se tiene que venir con saco y corbata. ¿Tengo que decirle eso, abogado?
Abogado: Sí, señor magistrado, está bien la costumbre, pero usted no puede imponer la costumbre en las audiencias, señor magistrado.
Juez: No me responda, señor, y no he terminado de hablar, y no es un debate con usted. Aprenda a respetar y aprenda a hablar cuando le corresponda. No le he concedido la palabra y esta es una audiencia judicial. Si usted me pide dispensa porque no tiene saco en este momento, se la voy a dar, pero creo que es una falta de respeto decirle al juez en una audiencia, interrumpiendo lo que dice, que usted no tiene por qué venir con saco a la audiencia.
Abogado: Señor magistrado, si bien es cierto, usted es el director del debate, lo sabemos todos, debemos dirigirnos a usted con respeto, pero es sabido por todos nosotros que ni el juez es más que el abogado, ni el abogado es más que el juez. Entonces, yo creo que aquí todos merecemos respeto. Yo estoy hablando con un tono de voz normal, sin estar alterándome ni alzándole la voz a usted, que se merece respeto. Pero yo también solicito el respeto adecuado, señor magistrado.
Yo, en este momento, le voy a pedir las disculpas del caso por no tener el saco que usted requiere, señor magistrado. No obstante, tampoco puedo limitarme a no decir que no existe una base legal que me exija a mí presentarme con un saco, señor magistrado. Si bien es cierto, está en la costumbre, se viene desarrollando así, eso no significa que yo me encuentre obligado, más aún cuando la Constitución Política del Perú dice que nadie está obligado a hacer lo que la ley no manda ni prohibido de hacer lo que la ley no impide. En ese sentido, señor magistrado, le extiendo mis dispensas.
Juez: Bueno, voy a dar por superado este incidente; y está exhortado, abogado, que se presente en las sucesivas audiencias con su saco y su corbata, porque así todo abogado se presenta a una audiencia, si no, yo también vendría en camisa, pues, señor abogado.
Abogado: Sí, señor magistrado, muchas gracias.
Con información de La República.