Una tarjeta de crédito es un lujo para algunos. Para otros, un peligro. Lo cierto es que el dinero plástico puede hacernos la vida más fácil solo si sabemos utilizarlo para no caer en las temibles deudas. Por eso debes plantearte una estrategia para saber cuál es el momento correcto.
Según recomiendan expertos, es mejor acudir a la tarjeta en casos de emergencia, pues si te excedes deberás pagar más adelante un monto mayor. El portal Entrepreneur da los siguientes consejos para que tu tarjeta te haga la vida más fácil y no afecte tus finanzas.
Consolida tus gastos: ten un orden financiero y concentra todo en un solo lugar. Si eres empleado, puedes usar tu tarjeta para tener todos los gastos en un punto. Desde ahí puedes hacer una transferencia general.
Para un emprendedor, por otro lado, se recomienda dos tarjetas: una para gastos personales y otra para la empresa. Igual se debe tener otra cuenta de débito para recibir el dinero. Con todo por separado, nunca tendrás confusiones con los montos.
Seguridad: ya que vivimos en tiempos de inseguridad, también se recomienda dejar de vez en cuando en casa la tarjeta de crédito donde se encuentran todos tus ingresos. Si eres de los que siempre la lleva consigo por si acaso, es mejor que tenga un seguro. Nunca la prestes ni compartas tu clave.
Financiamiento: si quieres sacarle el jugo a tu tarjeta y pagar tus cuentas sin intereses, plantéate tres fechas: la de corte, la de pago y la de inicio. La primera no viene en el estado de cuenta porque es un día después de la fecha de corte.
La fecha de corte, por otro lado, son los 30 días después de la fecha de inicio. Aquí la entidad financiera otorgante te permite gastar todo lo que esté dentro de tu límite de crédito sin requerirte su pago.
La fecha de pago depende de cada institución. Si bien no es necesario que cubras la totalidad de la deuda, si pagas el 100% de lo que compraste, tu financiamiento será gratis. Si pagas menos, tendrás intereses que cubrir.
Círculo de crédito: en algunos países, las entidades financieras valoran más el nivel de deuda que el ahorro. Podrías tener inversiones, ahorros, planes de retiro y más, pero no serás visible en el círculo de crédito. Por ello se recomienda la tarjeta. Usándola correctamente tendrás más acceso a créditos.