Nacionales

Lunes, 05 de diciembre del 2005

Derrumbe de dos muros deja al menos 16 escolares heridas en el Rímac

Al menos 16 escolares heridas, una de ellas grave, dejó esta mañana el derrumbe de dos muros en el colegio nacional María Parado de Bellido, en el Rímac, donde estudian 2,600 alumnas en los niveles inicial, primaria y secundaria.

Derrumbe de dos muros deja al menos 16 escolares heridas en el Rímac

Al menos 16 escolares heridas, una de ellas grave, dejó esta mañana el derrumbe de dos muros en el colegio nacional María Parado de Bellido, en el Rímac, donde estudian 2,600 alumnas en los niveles inicial, primaria y secundaria.




El incidente se produjo alrededor de las 07.30 horas cuando los muros, de más de un metro de altitud cada uno, sucumbieron al peso de las estudiantes que se apoyaban en ellos mientras esperaban la hora de ingreso a sus aulas, pues habían llegado tarde. Si bien la mayoría de estudiantes resultó con heridas leves, dado que cayeron encima de las paredes, una de ellas, Betsabé Rosel, del cuarto año de secundaria, fue la más perjudicada ya que presenta fractura de clavícula y problemas a nivel cervical. Tras el derrumbe, las escolares fueron conducidas al hospital Cayetano Heredia, donde personal del área de emergencia las evaluó y comprobó que tenían heridas leves en brazos y piernas. Ellas fueron identificadas como Rosa Moreno, Almendra Pizango, Karen Ramírez, Angela Torres, Liz Ardelín Rodríguez, Roserín Ávalos Bocanegra, Yulisa Campos Ventura, Yulisa Marcos, Stephany Sovero Delgado, Andrea Sovero Delgado, Jazmín Espíritu Román, Ivonne Rojas Verástegui, Andrea Tonola, Susy Salazar y Alexandra Díaz Salinas La joven Rosel, en tanto, quedó hospitalizada y sus familiares reclaman que se le tome una serie de placas para verificar su estado de salud, así como una indemnización al ministerio de Educación. Según el director del plantel, Jhonatan Vigo Roldán, el derrumbe se habría producido por la antigüedad de los muros; sin embargo, manifestó que la dirección no tenía responsabilidad “porque no había muertos”. La noticia de la caída de los muros tomó por sorpresa a muchos padres de familia, quienes de inmediato acudieron al colegio, pero, al ser impedidos de ingresar, protagonizaron conatos de enfrentamientos con el portero. Otras escolares que resultaron ilesas indicaron a los periodistas que las alumnas deben permanecer por lo menos una hora de pie cuando llegan tarde y escribir 500 veces “no debemos llegar tarde”.

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