Una vez más, la quema de pastizales para la ampliación de terrenos agrícolas, produjo un siniestro de proporciones que arrasó más de 20 hectáreas de cultivo en la zona de Trincavine, en el distrito de Pichari, Cusco.
El fuerte sol, la falta de acceso al lugar y los fuertes vientos extendieron las llamas que afectaron cultivos de plátano, yuca y maíz, perjudicando a más de 15 familias que perdieron su único sustento, por lo que pidieron ayuda a las autoridades.
Luego de más de seis horas de trabajo, cientos de pobladores de la zona, apoyados por moradores de anexos vecinos, controlaron el fuego con el apoyo además del personal de serenazgo que se trasladó desde Pichari hasta el sector afectado.
