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Miércoles, 11 de julio del 2012

Más de 6 mil niños dejarán de trabajar gracias a Proyecto Piloto Semilla

Alrededor de seis mil niños de zonas rurales de Huancavelica, Junín y Pasco, dejarán de trabajar para dedicarse a estudiar gracias al Proyecto Piloto Semilla.

Más de 6 mil niños dejarán de trabajar gracias a Proyecto Piloto Semilla

Alrededor de seis mil niños de zonas rurales de Huancavelica, Junín y Pasco, dejarán de trabajar para dedicarse a estudiar gracias al Proyecto Piloto Semilla.




Alrededor de seis mil niños de zonas rurales de Huancavelica, Junín y Pasco, dejarán de trabajar para dedicarse a estudiar gracias al Proyecto Piloto Semilla, el cual se enmarca en la Estrategia Nacional para la Prevención y Erradicación del Trabajo Infantil.

El ministro de Trabajo y Promoción del Empleo, José Villena Petrosino, señaló que la meta del Gobierno es erradicar el trabajo infantil a mediano y largo plazo, y lograr atender a 33 mil 800 niños a escala nacional hasta el 2014.

La coordinadora del proyecto, Maró Guerrero, señaló que esta iniciativa piloto tiene una vigencia de cuatro años y su diseño cuenta con tres componentes: educación, producción y sensibilización.

El componente educativo se trata de un programa de nivelación para aquellos niños en edad escolar que dejaron de estudiar o dejaron la escuela por ayudar a sus familias en las labores agrícolas, de pastoreo u otras propias del ámbito rural.

Para los adolescentes se desarrolla el modelo de Secundaria Tutorial, para aquellos que residan en zonas donde no se haya implementado este nivel educativo. Además, se brindará el servicio de capacitación técnica vinculado a un programa de empleo supervisado por el Ministerio de Trabajo.

En el tema productivo, el proyecto trabaja en las tres regiones con tres mil familias dedicadas principalmente al cultivo de cacao, cebada, frijol, café y papa, mediante transferencia tecnológica a fin de mejorar su productividad.

 “El propósito es aumentar en al menos dos por ciento la productividad y, sobre todo, acceder a mejores niveles de mercado para que los niños y adolescentes no se vean obligados o en la necesidad de realizar actividades económicas para ayudar a sus familias”, sostuvo Guerrero.

Finalmente, el componente de sensibilización apunta a desarrollar mayor información sobre la problemática del trabajo infantil, que en el campo no es suficientemente conocida, para que sea progresivamente entendida por los padres y la comunidad, manifestó.


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