Los principales terminales terrestres del Perú tendrán, durante los días de mayor afluencia de pasajeros, módulos de atención del Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (Reniec), donde se podrá tramitar el Documento Nacional de Identidad (DNI) para menores de edad.
El Reniec y la Superintendencia Nacional de Transporte Terrestre de Personas, Carga y Mercancías (Sutran) suscribieron hoy un convenio para concretar esa iniciativa, que busca, principalmente, combatir el secuestro y la trata de personas.
A través de estos módulos, se facilitará la documentación de los niños, niñas y adolescentes, quienes deben tener partida de nacimiento o DNI para poder viajar.
Además, la Sutran proporcionará al Reniec el listado de las declaraciones juradas firmadas, en casos excepcionales, por los adultos que viajan con menores que no están debidamente identificados y por las cuales se comprometen a gestionar el DNI del niño a la brevedad posible.
Los inspectores podrán consultar vía Internet la base de datos de Reniec desde los terminales terrestres, con el propósito de verificar la identidad de los pasajeros. Esto permitirá mejorar los mecanismos de control que se desarrollan en el marco de la campaña “Viaje seguro” de la Sutran.
“Con este convenio podremos compartir información con Sutran y así combatir la trata de personas; en particular, la trata de niños”, dijo el jefe nacional del Reniec, Jorge Yrivarren, quien añadió que Lima se ha convertido en un centro importante de trata de niños.
Por su parte, la titular de la Sutran, Elvira Moscoso, dijo que muchos niños viajan sin identificación, a veces solos y a veces escondidos en las bodegas de los ómnibus, lo que hay que evitar.
“Esos hechos están disminuyendo en los últimos meses y la gente ya está entendiendo la importancia de identificarse, pero aún falta mucho por hacer”, remarcó la funcionaria.
La posesión del DNI, además de servir para combatir el secuestro y la trata de menores de edad, representa muchas ventajas para los niños, ya que garantiza su derecho a la identidad y le facilita el ejercicio de otros derechos, como el acceso pleno a los servicios públicos de salud y educación y a los programas sociales del Estado.
La trata de personas es un delito que atenta contra los derechos humanos de las personas y, especialmente, de niños, niñas y adolescentes, y consiste en la captación, traslado y sometimiento de las víctimas a explotación sexual o laboral, mendicidad, o para la venta de las personas o tráfico de órganos o tejidos humanos.
