Cuidados dermatológicos que tu mascota necesita durante el cambio de estación
Especialista explica cómo los cambios de clima pueden alterar la piel de perros y gatos, y comparte recomendaciones para mantenerla saludable

Especialista explica cómo los cambios de clima pueden alterar la piel de perros y gatos, y comparte recomendaciones para mantenerla saludable
Con la llegada de una nueva estación, no solo las personas sienten los efectos de los cambios de temperatura y humedad; las mascotas también pueden experimentar alteraciones que afectan la salud y equilibrio de su piel, provocando incluso enfermedades dermatológicas si no se les brinda el cuidado adecuado.
Entre las más comunes figuran la dermatitis alérgica, asociada a alérgenos ambientales; la resequedad cutánea, que causa descamación y picazón; y las infecciones bacterianas o fúngicas, frecuentes cuando hay exceso de humedad o un mal secado tras el baño. Durante los meses cálidos también aumentan las picaduras de pulgas, que generan irritación y caída del pelo, mientras que la exposición prolongada al sol puede provocar quemaduras, sobre todo en animales de piel clara.
“La piel, el órgano más grande del cuerpo y principal defensa frente al entorno, también sufre los efectos del cambio climático, que puede alterar su nivel de grasa, humedad y sensibilidad. Más que la raza o el tipo de pelaje, influyen factores como el ambiente, la alimentación y la frecuencia del baño; por eso, mantener una rutina básica de cuidado dermatológico es esencial”, señala la M.V. Cecilia Padilla, especialista en dermatología veterinaria y medicina felina.
Durante el cambio de estación, pequeños ajustes en la rutina pueden marcar la diferencia para mantener la piel de tu mascota sana y libre de molestias. Aquí algunas recomendaciones útiles y accesibles que puedes aplicar en casa:
“Cuidar la piel de las mascotas no requiere grandes inversiones, sino atención y cariño. Los productos caseros pueden ayudar a mantenerla sana, pero no reemplazan la evaluación de un especialista. Cada mascota tiene un tipo de piel distinto: lo que funciona para una puede irritar a otra. Lo más importante es mantener una rutina constante y acudir al veterinario ante cualquier cambio, para preservar su salud dermatológica durante todo el año”, señala la M.V. Padilla.