Aunque la Asociación Nacional de Conductores Profesionales del Perú había anunciado un paro de 48 horas para los días 24 y 25 de julio en protesta por la creciente inseguridad y los ataques extorsivos, en varios puntos de Lima como Puente Atocongo, Caquetá, Puente Nuevo y Puente Piedra, la paralización no se concretó.
La razón detrás de esta respuesta dispar fue explicada por Miguel Palomino, representante de la Asociación Nacional de Conductores del Perú, quien afirmó que el paro fue suspendido debido a presuntas amenazas y represalias. “Nos mienten, y las extorsiones siguen al día. Íbamos a paralizar Lima, pero después de esto, decidimos plegarnos al paro del 27 y 28”, indicó.
Palomino también denunció que algunos conductores fueron intimidados con la pérdida de sus empleos si no acudían a trabajar. A esto se suma la indignación tras el asesinato de un conductor de la empresa El Rápido, ocurrido el pasado sábado 19 de julio a manos de un falso pasajero en Los Olivos.
NUEVA JORNADA DE PROTESTA
La Asociación Nacional de Conductores, integrada por unos 5 mil choferes, se prepara ahora para sumarse a la nueva jornada de protesta convocada para el 27 y 28 de julio, con el objetivo de exigir mayor protección frente al crimen organizado y la extorsión.