Esta tarde, el ministro Juan Santiváñez reconoció que un grupo de armas incautadas durante los contantes operativos que realiza la Policía Nacional contra la inseguridad ciudadana, podrían estar en el mercado negro y usándose nuevamente en delitos, como lo denunció hace unos días un medio de comunicación.
El titular del Interior dijo también que iniciaron una investigación sobre el tema pues el protocolo exige que, tras una incautación, los objetos pasen a disposición de la Fiscalía o se entreguen a la Superintendencia Nacional de Control de Servicios de Seguridad, Armas, Municiones y Explosivos de Uso Civil-Sucamec.
DETERMINAR RESPONSABILIDADES
"Nosotros no solamente hemos iniciado un procedimiento administrativo disciplinario. La investigación tiene que desarrollarse y también la Policía está trabajando en este momento en la determinación de la trazabilidad de estas armas para determinar realmente la fehaciencia [sIc] de la información", dijo el funcionario en entrevista con RPP.
"Hay que reconocer que sí hay un grupo de armas que, definitivamente, podrían estar en el mercado negro y hay que determinar también las responsabilidades; porque aquí la obligación de la Policía Nacional, cuando concluye una investigación, es ya sea ponerla a disposición del Ministerio Público o entregarla a la Sucamec para su custodia", agregó.