Los casos de consumo de sustancias psicoactivas han experimentado un alarmante aumento desde 2021 en los establecimientos del Ministerio de Salud (Minsa). De enero a septiembre de este año, se atendieron más de 57,500 personas, según la directora de Salud Mental del Minsa, July Caballero Peralta, quien además destacó la necesidad de atender especialmente a las mujeres, un grupo frecuentemente estigmatizado en el acceso a estos servicios.
Atención a personas con adicciones
La Dra. Caballero Peralta resaltó que el Minsa está comprometido en ofrecer atención especializada a personas con problemas de adicción mediante sus centros de salud mental comunitaria. Estos establecimientos proporcionan programas de rehabilitación ambulatoria que cubren diferentes etapas de la vida, y que están diseñados para ayudar tanto a hombres como a mujeres a enfrentar esta problemática de manera integral.
Carolina Inés Gorlero, facilitadora del programa Wise para mujeres expuestas a sustancias, subrayó que en América Latina existe un estigma importante hacia las mujeres consumidoras. Esto se debe, en parte, a los roles de género que les asignan el papel de cuidadoras. Al desviarse de este rol, las mujeres experimentan rechazo social, lo que suele llevarlas a evitar buscar ayuda profesional.
Consumo de sustancias
Además del estigma social, Gorlero señaló la importancia de que el sistema de salud considere las necesidades particulares de las mujeres. “Es necesario implementar centros específicos para ellas, pues muchas veces llegan a los servicios médicos en condiciones avanzadas de enfermedad, debido al autoestigma y la reticencia a solicitar ayuda”, explicó. Esta falta de atención especializada no solo retrasa su recuperación, sino que también agrava sus síntomas, haciéndolos más difíciles de tratar.
Gorlero hizo hincapié en la importancia de un lenguaje respetuoso y empático hacia las mujeres con trastorno de consumo de sustancias. “Debemos entender que esto no es una elección, sino una condición de salud que requiere tratamiento y cuidados. La forma en que hablamos de este tema puede influir en el acceso de las personas al tratamiento que necesitan”, puntualizó.
