La hipertensión arterial, conocida comúnmente como presión alta, puede llevar a la aparición de otros problemas de salud como un infarto al corazón o al cerebro y daño renal si se diagnostica tardíamente o si no se tiene un buen control de la enfermedad, con una vida poco saludable.
Así lo advirtió el jefe del Departamento de Medicina Interna del Hospital Edgardo Rebagliati del Seguro Social de Salud, Dr. Martín Alfageme, quien sostuvo que este tipo de enfermedades pueden llevar a un paciente a necesitar de hemodiálisis.
“Los pacientes con hipertensión arterial, es decir, con presión sistólica de 140 o más o diastólica de 90 o más, tienen mayor riesgo de presentar enfermedades cardiovasculares y, debido a que no presentan síntoma alguno, pueden debutar con cualquiera de estas complicaciones o con daño renal y requerir hemodiálisis”, señaló en el marco del Día Mundial de la Hipertensión, a conmemorarse el 17 de mayo de casa año.
Este problema de salud se desarrolla de forma lenta y progresiva. Es asintomática, pero cuando la presión arterial ya está descontrolada, la persona puede tener dolor de cabeza a nivel cervical, sensación de cansancio o fatiga, dolor torácico, falta de aire al subir o hacer esfuerzo físico moderado o severo, entre otros síntomas.
De otro lado, el Dr. Alfageme resaltó que este problema de salud está asociado a hábitos de vida no saludables. “Se puede prevenir o retardar su aparición mediante la adopción de estilos de vida saludables como hacer ejercicios, comer frutas y verduras en cantidades adecuadas, consumir baja cantidad de sal, evitar el consumo de alcohol o tabaco, así como el sobrepeso y la obesidad”, señaló.
En caso de tener antecedentes familiares, se recomienda tener un monitoreo periódico de la presión arterial para prevenir y/o tener un diagnóstico precoz de hipertensión, a fin de recibir tratamiento oportuno de ser necesario.
Finalmente, el galeno recomendó a quienes ya tienen el diagnóstico de hipertensión arterial realizar un seguimiento constante de su presión arterial con su médico y cumplir estrictamente con el tratamiento indicado por el especialista.