A vísperas de la Nochebuena, el Seguro Social de Salud (EsSalud) sorprendió, con diversos regalos y una singular actividad, a niños con diagnóstico de leucemia y otros tipos de cáncer, quienes llevan el tratamiento de quimioterapia en el Hospital Guillermo Almenara, para superar esta enfermedad.
La sorpresa llegó desde muy temprano, cuando Papá Noel ingresó al área de oncología pediátrica del nosocomio junto a José, “El Puma” Carranza, médicos, enfermeras y “el chapulín” de Alianza Lima, quienes entregaron varios regalos a los pequeños pacientes para llenar de alegría sus corazones.
Mejorando su salud
El Dr. Julio Guevara, jefe del Servicio de Oncología del hospital Almenara, dijo que esta actividad se realizó con el fin de dar alegría a los niños que vienen luchando la batalla contra diferentes tipos de cáncer pero que vienen mejorando su salud.
“En estas fechas muy especiales quisimos adelantar la Navidad para dar un momento de felicidad a los niños que pasan un proceso muy difícil. Hoy estuvimos con el Puma Carranza, Papá Noel y otros personajes, para ponerlos contentos porque eso es bueno para su salud”, enfatizó.
Pacientes pediátricos
El especialista informó que cada mes se atienden a 250 pacientes oncológicos pediátricos, sumando al año más de 3 mil pacientes. La proyección de alta hospitalaria es del 30% en el servicio.
Mencionó que, en su mayoría, los pacientes oncológicos que atiende el servicio son menores diagnosticados con linfoma, leucemia, tumor de Wilms, Hepatoblastoma y tumores cerebrales. Las edades oscilan entre los 6 meses y los 14 años de edad y, por cada 2 mujeres, hay 1 varón atendido.
El tratamiento que recibe la mayoría de los menores es la quimioterapia, que consiste en el uso de medicamentos que se administran por vía intravenosa o por vía oral y pasan a través del torrente sanguíneo para llegar a las células cancerosas en la mayoría de las partes del cuerpo.
Efectos secundarios
A su vez, las terapias biológicas o inmunoterapia, cuyo tratamiento utiliza el sistema inmunitario del cuerpo para destruir las células cancerosas, previene y disminuye la velocidad del crecimiento del tumor, la propagación del cáncer y genera menos efectos secundarios.
Cabe precisar que durante la emergencia sanitaria por la COVID-19 las atenciones a los pacientes oncológicos no se detuvieron, pues es de vital importancia que continúen con el tratamiento indicado por los médicos tratantes para vencer la enfermedad y evitar recaídas.
