Una fuerte revelación realizó Mónica Cabrejos, conductora del programa “Al Sexto Día”, en medio de la promoción de su libro biográfico “Mujer Pública”, donde se incluye el duro episodio que le tocó vivir.
Las fuertes declaraciones se dieron en el espacio televisivo conducido por el periodista Beto Ortiz, donde la presentadora hizo distintas revelaciones en torno a su vida personal y profesional, siendo lo más sorprendente cuando confesó que fue víctima de abuso sexual en plena pandemia.
Contó que estaban en su casa de playa y decidió que no quería acostarse con el periodista deportivo y supuestamente él lo había comprendido, pero al abrir otra botella de vino se sintió mareada, como si algo tenía el trago que la dopó.
“Me invitó a pasar mi cumpleaños a una casa en Asia. Fuimos y como una mujer adulta lo primero que dije fue: Aceptarte la invitación no es sinónimo que voy acostarme contigo”, contó muy visiblemente afectada al recordar el hecho.
“Pensé que callada iba a ser cómplice, no solo de quien me lo hizo a mí, sino de todas las violaciones que se dan día a día en el país. Creo que la única manera de sanar, es decirlo, independientemente de que tú que me estás viendo, me creas o no, sentí la necesidad de decirlo”, añadió Cabrejos.
Sobre el autor del abuso en su contra solo señaló que es un exfutbolista y actualmente es periodista deportivo, al que conoce desde hace más de 24 años y ningún momento reveló la identidad de su agresor.
MÓNICA HABLÓ CLARO Y SIN CALLARSE NADA
Continuó narrando el oscuro pasaje y agregó: “Desperté desnuda, tapada, la ropa de él estaba debajo de mi cama (…) En ese momento supe que él me había drogado (...) Me dijo ‘Quién te va a violar, eres una mujer de 45 años, por favor. Yo soy pituco, no quiero escándalos’. Se puso violento. Le dije ‘llegando a Lima me haré un examen toxicológico’. Yo necesitaba una prueba para poder incriminarlo. Es un psicópata. Por eso, decidí contarlo, y para que no le pase a nadie más”.
“En Perú, violar es lo más fácil que puede existir, más asequible y barato. Probar una violación en una mujer adulto es lo más difícil, no basta con que yo lo diga. ‘Viola fácil’ es una droga que no deja rastro, se metaboliza en menos de 12 horas, es decir, que cuando te despiertas de la violación ya no hay droga en tu cuerpo y no tienes cómo probarlo”, enfatizó al terminar la reveladora entrevista.